CARTA DE UN MILLENIAL A UN BABY BOOMER
Estimado Baby Boomer (Adulto mayor):
Le habla la generación de cristal; hablo en nombre de los centenialls y los millenials. Y hablo también, quizá, como una fracción de estas generaciones que han sido criadas de forma muy diferente a usted.
Seguramente, al leer estas primeras líneas, pensó en reclamos y quejas, como es costumbre con mis contemporáneos, más esta carta no tiene esa connotación. Hoy, le escribo con dos propósitos: el primero, es lograr que nos comprenda, así como a nuestras motivaciones y comportamientos; el segundo, va con relación a cómo puede hacernos entender la situación en la que vivimos.
Es importante saber que, a pesar de que somos responsables de nuestros actos, no fuimos responsables de nuestra educación (al menos conscientemente). Puesto que la educación que recibimos de nuestros padres y profesores no la elegimos nosotros, y aunque parezca que sí, tampoco elegimos la educación que nos dio una herramienta sumamente poderosa, tanto para bien, como para mal: los medios de comunicación.
Lamentablemente, el mundo ha hecho de mi generación una de puros títeres, que, sin darse cuenta, son adoctrinados y manipulados con "tendencias". El famoso "contenido" de las redes se inserta de forma atractiva en nuestro pensamiento con ideas antes impensables. De este mismo modo podemos recuperar sus conciencias.
No se trata, necesariamente, que como adulto comience a grabar tiktoks ni a usar un lenguaje diferente al suyo, pero tampoco se trata de regaños, confrontación, subestimación o cualquier otro tipo de comunicación fallida. De lo que sí se trata, es de explicar la verdad de manera, breve y concisa.
Actualmente, los famosos "reels", "tiktoks", o, en resumidas cuentas, los videos que ven sus hijos, nietos o sobrinos, explican una situación en un minuto. Ya sea una noticia, un tema o un chisme, todos tienen la misma estructura atrapante: un título o pregunta captadora de atención. Por ejemplo: una llamada a describir más. Por ejemplo: "...quédate, que en este vídeo te lo cuento". O en nuestro caso: "...yo te puedo explicar muy fácilmente".
El contenido de manera resumida y entendible para todos. Como decía Xdxd: "Si no puedes resumir tu idea en 10 palabras, no tienes idea".
Y por último, un cierre o conclusión, que dependiendo de si el tema se extendió a más de un minuto, éste puede ser invitando a continuar la plática en otro momento (o viendo la parte 2 del video); o el cierre del tema con una frase como: "para más contenido como éste sígueme", que en nuestro caso sería: "como este tema hay muchos más que podemos platicar".
Es importante entender que, si en el primer intento no captó la atención del joven, no se desanime a seguir intentando. En esta cultura de la desinformación, los jóvenes tienen al alcance de una "scrolleada" (o bien mover un dedo), información diferente y personalizada según su interés. Así que probablemente en el segundo o tercer intento de tema diferente, el muchacho al que se dirige pueda quedar atrapado, y de esta manera hacer un pequeño cambio.
Esperando que esta información haya sido de utilidad, me despido deseándole la mejor de las suertes en este nuevo camino de "conexión" a través de la "conectividad" que nos enseña el mundo de las redes sociales.
Atentamente:
El joven que quiere mejorar a la
juventud.