¡TODOS SOMOS CULPABLES!

¡TODOS SOMOS CULPABLES!

Este próximo viernes (santo) se cumplen 1989 años de la crucifixión del Hijo de Dios, precisamente a las 3 de la tarde de ese día en que el dador de todo fue inmolado para redimir del pecado a la humanidad.

No se vale decir que "yo no tuve nada que ver ... fueron los judíos. Hay que tener presentes que si alguien nos rescató de las garras del infierno ... fue el Cordero Inmaculado el que voluntariamente aceptó la muerte ... y una muerte de cruz.

Tenía el poder de haberse sustraído de tal calvario, pero Él decidió que fuera así, ofrendó hasta la última gota de su sangre, para lograr la salvación encadenada al pecado, así lo decidió.

Ahora hay que reflexionar el porque del Deicidio, donde toda la humanidad de antes, de ahora y después es responsable de este trágico acontecimiento que lavó las vestiduras de todos hasta dejarlos más blancos que la nieve.

En esta época influida por el liberalismo y el relativismo, donde "la razón" ha tomado el lugar de Dios, no hay espacio para Él, dando como consecuencia una línea de pensamiento contraria a la verdad.

A pesar de la decisión del Hijo de Dios de ofrendar su sangre, nadie lo agradece la mayoría del mundo anda afanado en sus propios intereses y la redención entra al ámbito de la fábula, andamos tras el dinero, el placer y el poder. Satisfaciendo a nuestro "yo" y distraídos por el pecado y la mentira, mientras que Dios observa desde lo alto dejando hacer, respetando nuestra libertad. Habíase visto mayor desacato, ni la ley de Dios, ni la voz de los profetas, que nos previenen desde la antigüedad, nos hace que entremos en razón para volver al redil del Buen Pastor.

Preferimos ignorar a la divinidad, su ley y su doctrina contenida en las Sagradas Escrituras ... ¡es el colmo! De la ingratitud ... ya ni la Iglesia del Salvador tiene influencia en el "pueblo de Dios", lo hemos sacado de nuestro diario horizonte, "acaramelados" al pecado, que es todo aquello que no quiere Dios para sus hijos.

... Somos sus hijos, de ser siervos y esclavos con la redención pasamos a ser familia ... El Redentor es nuestro hermano por decisión divina, y Dios ... Nuestro Padre por lo tanto junto y al amadísimo Espíritu Santo, somos la familia de Dios ... A esto renunciamos con el pecado, pecado que ha sido perdonado desde la Cruz y que, con un pequeño impulso de arrepentimiento rescatamos el tesoro de los Cielos.

Arrepiéntete y cree en el Evangelio, no importa que tus pecados hayan lacerado la espalda de Jesucristo, no importa si con el pecado hayas sido cómplice de su martirio ... Él, si te arrepientes ... te lo perdona ... arrepiéntete antes del Viernes Santo para que Él reciba en el camino de la Cruz el agua fresca del arrepentimiento para que mitigue la sed y el calor rumbo al martirio.

¡Todos somos culpables! ... de este drama sin igual ... Los judíos lo condenaron, el Imperio lo crucifico y nosotros lo clavamos con nuestros pecados ... arrepiéntete y acude al tribunal del perdón para que la crucifixión del Hijo de Dios tenga el sentido salvífico que lo motivó.