¡S.O.S.! PERVERSIÓN SEXUAL INFANTIL A LA PUERTA

Es una mega mentira la de las autoridades políticas cuando pregonan voz a cuello, que aman a la niñez y que luchan por defender todos sus derechos. Si bien algunos funcionarios hacen algo por su salud y seguridad física, los incondicionales al poder, abren las puertas para que depredadores sexuales entren a la psique de los niños. ¿Cómo? A través de imágenes pornográficas en las redes sociales; el cibermundo al que acceden, o del que son dependientes, adolescentes y no pocos niños.

El tema de pornografía infantil ya tiene historia, pero antes nadaba en las aguas fangosas y oscuras por donde se deslizaban las mafias. Desde hace años, por desgracia, el tema del sexo en los niños ya se pone sobre la mesa de cualquier recinto. ¿Por qué? Porque, increíblemente, la más alta y más "honorable" de las organizaciones de la humanidad, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha sido la fautora y cómplice de la libertad sexual infantil. ¡Qué descarado delito! Porque con toda premeditación, alevosía y ventaja, ¡pervierten a la generación más inocente, más noble y más vulnerable!

Desde hace décadas, cuando la ONU empezó a hablar de los derechos de los niños, incluyó, por supuesto, los de tipo sexual, bajo nombres como salud y protección. Entonces hablaban en contra de la violencia y abuso sexual en niños; luego vino el derecho al aborto en niñas en casos de violación, aun sin el consentimiento de sus padres. Luego, apoyados en la ideología de género, defendió la ONU que cada niño o niña podía elegir su preferencia sexual o "género". En pocas palabras, se fue permitiendo a los niños cualquier tipo de expresión de carácter sexual, incluso, la tremenda decisión de cambiar su sexo.

Ante el apabullante uso de las redes sociales en todo el orbe, incluso por los que apenas tienen uso de razón (6-7 años), la ONU, en su arbitrario y odioso papel que se dio a sí misma, de "juez moral" de la humanidad, se atrevió, con toda malicia, definir lo que se permite y lo que no, lo que hombre y mujer pueden hacer o no; y ahora, lo que los niños pueden ver o no. Todo esto, según ellos, para "proteger" a la infancia del abuso, explotación o de cualquier delito sexual.

En un reciente tratado sobre ciberdelincuencia, la ONU, con careta farisaica de moralidad, condenó la difusión de pornografía infantil con imágenes de niños reales… ¡pero no condenó la pornografía infantil con imágenes creadas por la Inteligencia Artificial (IA). Por el contrario, dentro y fuera del recinto de la ONU, se escuchan voces a favor del derecho de los adolescentes a las expresiones sexuales, de la "reducción" de los delitos de los pedófilos si se les permite satisfacerse con la porno infantil y de otras estupideces más… ¡Como si no supiéramos que están abriendo la puerta a la pedofilia y a la pederastia! … ¿Y los cristianos?... Lamentablemente, como si nada pasara.

Padres de familia: quizá no puedas evitar que tus hijos usen la computadora o el celular (cuyo uso se recomienda hasta una mayor madurez), pero lo que sí puedes hacer es:

Enseñar y vivir en familia, las virtudes cristianas (en este caso, la pureza, el pudor, la decencia, la castidad).
Poner candados virtuales en sitios web donde los niños puedan caer en las trampas de los depredadores sexuales.
Advertir a tus hijos desde la pubertad, o antes, de la ciberdelincuencia, que se aprovecha de la inocencia, ingenuidad o curiosidad de los niños.
Convencerlos profundamente de jamás enviar por redes sociales fotos de su cuerpo ni tratar temas de tipo sexual con nadie. (Esto podría evitarse con la buena y oportuna instrucción de los padres hacia sus hijos, conservando siempre una relación de confianza entre ambas partes).
Recordar a los hijos que un mensaje o foto digital puede acabar, al instante, con lo más caro de su persona: su honorabilidad. Hay quienes terminan en suicidio.

¡S.O.S. con los "derechos" que promueve la ONU!