¡VENECIA A TRES BANDAS!

27.08.2025

Acaba de regresar de un viaje por Italia una amiga… ¡Y viene alucinada de su experiencia! Estuvo varios días en Venecia con toda la carga histórica que representa. El Puente de Rialto era su vecino y fue de visita al PalacioDucal, a la Basílica de San Marcos, paseó por los canales en Góndola, ¡y comió Spaghetti a morir! Llegó hablando de los pilotes impudribles en los que se asienta la ciudad; es un bosque bajo el agua. Las mandolinas fueron el fondo musical de los atardeceres, tomando un chianti en un cafecito tradicional o una copa de buen vino.

La Ciudad Ducal la recibió con los brazos abiertos, sus museos, calles y templos; y el Puente de los Suspiros le dieron la bienvenida. En el templo de San Giovanni asistió a la Santa Misa y recibió la Eucaristía, con el sabor solobre del Adriático. Deambuló por sus islas y disfrutó de lejos las cúpulas de Murano, con el sonido de fondo del Campanario de San Marcos. Canales, góndolas, palacios y spaguetti, son el sabor veneciano con un fondo musical para enamorados.

La capital de la región de Véneto, asentada en un archipiélago de 118 islas, en una laguna que la atraviesa el Gran Canal. Es un poema gastronómico de platos típicos como Cichetti (tapas venecianas), el Fegato allá veneziana (hígado de ternera), o un Sarde in saor (sardinas agridulces); y para terminar, un tiramisú, postre originario del Véneto. Todo está rociado con una copa de Ombra, Spritz Aperol o una Bellini… ¡Cosa bella!

Hay quien dice ir a enamorarse en Venecia… ¡y morir!