LOS MISERABLES

01.03.2024

Este título, es una evocación a una obra literaria del francés Víctor Hugo, pero que tiene que ver con un tema a reflexionar.

En todos lados, si pones atención, surgen tragedias humanas de las cuales ignoramos las circunstancias. Basta un minuto, para que un alma acongojada por los avatares de la vida vea una rendija a su dolor y tenga la capacidad de dar a conocer sus cuitas y dolores en segundos.

Un minuto basta y conoces lo que prefirieras desconocer … un alma desafortunada que acude a una escuela para aprender a leer y a escribir con el interés de saber firmar, porque su vida familiar es una tragedia. Sus ojos, me lo dijeron todo y sus palabras y miserias, me dejaron ver lo rico y afortunado que soy … pero con el alma adolorida. Y un profundo agradecimiento a mi Creador, por no estar en esa situación.

Aun así, ese minuto te transforma la vida. Antes del encuentro crees que llevas una vida de privaciones y dolores y en un segundo, se transforma y te hace ver que tienes demasiado. Posees el conocimiento, la inquietud por las cosas trascendentales, eternas … también por lo pasajero; el cosmos, con sus increíbles misterios en las esferas celestiales, la profundidad del mar y sus creaturas, todas maravillosas, sus entornos y habitantes. La suma de conocimiento humano reflejado en la Historia y sus tratados y el adelanto científico basado en el conocimiento pasado. Las bases vienen de muy lejos … y datan del nacimiento de la civilización, la filosofía y los versos, la música, en fin, un cúmulo de conocimiento para la sensibilidad de los sentidos y otros más trascendentes, para entender el mundo espiritual y su impacto en la salvación.

Pero el sufrimiento humano de los más pequeños, ése impacta en tu intelecto haciendo surgir la compasión y la empatía. Todo esto es motivo para entresacar los principios filosóficos del vivir teniendo conciencia de ello.

Tus valores se rebelan ante la situación que viven los sencillos. Los que han tenido pocas oportunidades y han sido víctimas de la incomprensión y la ignorancia.

Basta un minuto, como lo he dicho, para transformar a la pobreza y la indignación en un tesoro invaluable, que a veces, se ignora que se posee. La sensación que te produce mirar y contemplar a la Gioconda, es ver en ella, la suma de la sensibilidad, el estudio, la práctica de la técnica y la filosofía.

La pobreza manifiesta es lo contrario, es la contra Gioconda, la suma de la desgracia, la ignorancia y la dejadez espiritual… casi irracional.

Toda persona, dicen, es un mundo. Hay mundos buenos para la vida y mundos que envenenan la misma. En este mundo coexisten los extremos … lo bueno y lo malo, lo bello y lo feo, lo valioso y la basura … En fin, basta un minuto y la visión, de tu pequeño mundo, se transforma.

Las miserables siempre convivirán, desde la oscuridad, con el triunfo y la bonanza.

¿En que lado te encuentras? … Así que … ¡no nos quejemos!