LA EXTINCIÓN DE LA CULTURA
Hace algunos años, gente preocupada por una extinción de especies vegetales del planeta, tuvo la idea de preservar parte de la naturaleza y se dio a la tarea de salvaguardar la biodiversidad de las especies de cultivo que sirven como alimento.
Esta reserva, en caso de una catástrofe mundial, se conoce como "Bóveda del fin del mundo", pues es capaz de resistir terremotos e impactos de bombas nucleares. Está situada a 1,300 k.m. del Polo Norte, en la isla de Spitsbergen, bajo tierra, y en los últimos años han logrado conseguir 140,000 muestras de arroz; 70,000 muestras de cebada y entre 10,000 y 20,000 muestras de patatas, guisantes, sorgo y otros más.
Esta garantía, servirá en caso de una catástrofe nuclear para asegurar la alimentación de los supervivientes. Hasta aquí, no deja de ser una anécdota curiosa, pero …
¿Y el conocimiento? … Si se llegará a extinguir, nos dejaría en la edad de piedra, ya que nuestra civilización se funda en el conocimiento acumulado de los siglos.
Así que, sería conveniente tener como un "Arca de Noé del conocimiento" y resguardar los mejores libros, especialmente sobre los temas torales de la vida.
Dios no lo quiera … ¿Qué pasaría si ocurriera un traspié militar y destruya gran parte de la humanidad? … Quedaríamos en blanco y la humanidad residual, presa de la ignorancia.
¿Para qué esperar? … ¡manos a la obra!