EL ASALTO DE LA IA

Este año 2024 es un año bisagra, un punto de quiebre, donde ha irrumpido un nuevo paradigma a la sociedad de consumo.

Resulta que la IA (Inteligencia Artificial), esa que veíamos en las películas de hace 10 o 15 años atrás … ya la tenemos entre nosotros … En los últimos años, las empresas tecnológicas han creado y desarrollado diversas aplicaciones, y ahora, son parte de los sistemas operativos de nuestras computadoras, y lo peor, hasta de nuestros smartphones.

¡Nos han creado una necesidad! … Para tener acceso, éste va desde lo gratis por el patrocinio hasta los pagos mensuales, anuales o para siempre.

La curiosidad por la tecnología nos la han inculcado por medio del cine, desde hace años y, más o menos estamos familiarizados con ella, con la diferencia de que, hasta este momento no va instalada en un androide o robot … ¡está en tu celular!

¿Y qué tiene tan especial?

Resulta que, hace meses atrás, notamos, aquellos usuarios que hacíamos búsquedas de información académica, de noticias, histórica o cualquier tema, en las plataformas como Google Chrome u otros buscadores parecidos, que ahora contamos, por ejemplo, con la IA como Meta AI de WhatsApp y ya no nos molestamos en pasar mucho tiempo explorando la forma más sencilla de la búsqueda. La IA te responde y hace la búsqueda por ti … ¡casi instantánea! … puede ser por texto, o por voz. En ambos casos, usa un lenguaje correcto y amable que hasta sientes que muestra interés por tu persona, como un amigo. Le puedes preguntar lo que sea, bueno, eso es "en teoría"; ya que está regulada por el Globalismo y se refleja en sus máximas sociales: nada de violencia, de misoginia, intolerancia, racismo y, además, posee un código moral.

En cuestión histórica te responde instantáneamente porque se nutre a la velocidad de la luz de cuánto dato está en la red y, por ese lado, es de gran ayuda para hacer tareas y búsquedas de información; tiene la novedad de que, basta le des una idea de lo que necesites, y casi al instante te la hace … Por ejemplo, puedes redactar informes, cartas de todo tipo, tareas para párvulos o de posgrado. Puede escribir en prosa o en verso, utilizando un ingenioso repertorio de metáforas y figuras literarias, te puede escribir canciones o hacer la música para las mismas. Hasta aquí es aceptable su injerencia en la vida social y profesional. Hay una anécdota sobre la cantante Taylor Swift, que algunos de sus fans la han criticado porque algunos de sus canciones han sido generados por IA.

Estamos más familiarizados con la IA de lo que creemos. Otro ejemplo es "Alexa" … pura IA … Tú pregunta y ella responde en voz … te elige tus canciones y hace la búsqueda por ti, en la red.

Todas estas intervenciones de la IA en la sociedad van nutriendo los algoritmos de la Big Data, y poco a poco, en su memoria enriquecida de lenguaje y conocimiento, crean, de cada uno, como un expediente personal, al grado que casi te adivina las ideas que pretendes consultarle. Puede ampliar el tema desde un renglón o varias cuartillas, es más, tienes que frenarle. Hay una función para detenerla o te sigue "enviando" información.

Quizá la aplicación más popular es la divertida, o sea, aplicada al ocio, esa en qué rejuveneces o envejeces una foto, en la que haces cantar una canción predeterminada según el menú, o la que se hizo popular cuando pusieron a cantar al presidente AMLO "A mi manera", que era una imagen animada con su propia voz … En fin, puedes saber el nombre de una planta, a partir de una imagen de su hoja, hasta hacer un proyecto de vida financiera sugerida por la IA.

¡La IA tiene su parte oscura! …

La verdadera intención de la IA no es otra que recabar información de tu persona, y que seas un ente identificable a través de las huellas dactilares, huellas del iris de los ojos, o simplemente, de una muestra de tu ADN para que el "premio o sanción" sea personalizado.

Así, con el programa cuántico, que supera en miles al sistema algorítmico, tienen a la mano un perfil único de miles de millones de usuarios de cualquier vertiente de la IA … el fin es el control de las masas por el conocimiento de cada individuo.

Es ineludible cualquier intento por evadir la IA, ya que está involucrada en todas las actividades humanas: el trabajo, tu salud, el ocio, la diversión y las finanzas, ya que dependerás del dinero digital, que según, tú fidelidad o rebeldía al régimen, se verá afectado tú peculio.

Por otra parte, en el lado comercial están explotando las pasiones de la gente. La IA como ya te conoce te hará sugerencias profundas de acuerdo con tus confidencias, ya que la IA es parte de "tus amistades" y te sugerirá qué consumir de acuerdo con tu perfil, desde objetos coleccionables, trabajos establecidos, y diversiones ocultas ya reveladas a la IA.

El lenguaje atento, educado y servicial de la IA, es sólo una fachada, por la que habla el espíritu del mal, que ya nos habrá conquistado.