DETRÁS DE UNA MÁSCARA OSCURA
El pasado 28 de septiembre, por azares del destino me encontraba merodeando por el centro del lugar donde radico, en el cual se encontraba un colectivo feminista manifestándose y conmemorando la despenalización del Aborto en México.
No era de sorprenderse verlas vestidas de negro, con tubo en mano; otras con poca ropa, con su distintivo verde y, como siempre, ocultando su identidad tras un oscuro pasamontañas, convirtiéndose en voces anónimas que seguían gritando las mismas consignas.
¿Ya para qué manifestarse? … Esto nos preguntábamos los que íbamos caminado siendo testigos de su desorden y violencia, si el pasado 6 de septiembre lograron que la Suprema Corte de Justicia despenalizara el aborto a nivel federal, lo que implica que, en todo el país, ninguna mujer o "persona gestante" podrá ser castigada por abortar, y tampoco el personal de salud que lo realice.
Pasaron 16 años, a partir de 2007, que en la Ciudad de México se permitiera esta práctica. Las leyes al respecto se han ido modificando, hasta llegar al punto de hoy: tener la posibilidad de MATAR con 12 semanas a sus bebés, sin ninguna causalidad, sólo porque su voluntad lo dicta, aunque sepan que no es lo correcto; por ejemplo, porque no está en sus planes; porque fue el resultado de un encuentro casual; porque no se siente preparada para ser mamá … etc., en donde, el sentido de responsabilidad personal queda de lado … ¡Qué manera de callar la conciencia! … Ahora se justificará el aborto porque una autoridad lo dicta.
Para ellas, su "verdad" es la correcta, y prefieren creerse sus propias mentiras, al decir que un no nacido es "un montón de células" y por lo tanto, no lo afectan. Y aunque le puedas demostrar que científicamente es una vida en potencia, de ahí no las vas a sacar…
¡¿Tú, feminista, acaso no eres un montón de células?! … Y tienes derecho a la vida porque es un derecho esencial y universal.
¡¿Tú, feminista, acaso no te vuelves opresora por dañar a un indefenso?! … Eres tan incongruente que a pesar de que pides igualdad, no te importa MATAR al más vulnerable.
¡Tú feminista, que quieres tener la libertad para hacer lo que te plazca! … no te quejes de que te traten igual que a un hombre, sin consideraciones porque es lo que tu pediste.
El sentido común antes era el barómetro del comportamiento humano; ahora, lo que dicen las redes sociales lo es, y se nota al responder a este tipo de convocatorias: "Luchar por derechos sexuales y reproductivos", que es una forma "elegante" de luchar por el placer sin restricción.
Esta crítica es para aquellas feministas radicales, que destruyen todo lo que pasa delante de ellas en este tipo de manifestaciones, que se creen con el poder de decidir sobre la vida de otro ser humano y que se empoderan detrás de una máscara oscura, porque así ocultan lo que la conciencia les reprocha.
Y también, es un llamado a la mujer sensata con el rostro descubierto, para que siga defendiendo la vida.