Demanda Texas a la US Masters Swimming por incluir hombres en competiciones femeninas

22.07.2025

La demanda presentada por el estado de Texas señala prácticas engañosas por parte de U.S. Masters Swimming. Competidoras femeninas fueron desplazadas por un hombre que ganó cinco medallas de oro en categoría femenina. El caso reabre el debate sobre equidad y verdad biológica en el deporte.

(LifeSiteNews/InfoCatólica) El fiscal general de Texas, Ken Paxton, anunció el 17 de julio que ha presentado una demanda contra U.S. Masters Swimming (USMS) por permitir que hombres biológicos participen en competencias femeninas de natación, en violación de la orden ejecutiva del presidente Donald Trump que prohíbe la participación de hombres en deportes de mujeres.

«La política insana de U.S. Masters Swimming de permitir que hombres participen en competencias femeninas es profundamente injusta para las atletas y además ilegal», declaró Paxton.

Y añadió: «La organización ha cedido ante activistas radicales que promueven una guerra de género, y ha privado a las participantes femeninas de la oportunidad de destacar al más alto nivel al permitir que hombres ganen innumerables pruebas. Esta demanda responsabilizará a USMS por sus acciones, y seguiremos luchando por proteger la integridad del deporte femenino».

La demanda se produce después de que Paxton iniciara una investigación en mayo por presunta violación de la Ley de Prácticas Comerciales Engañosas de Texas, tras permitir que hombres que se identifican como mujeres compitieran en la categoría femenina durante el campeonato nacional de primavera de USMS, celebrado en abril de 2025.

El documento judicial destaca especialmente el caso de un hombre biológico de 47 años, «Ana» Caldas, quien ganó cinco medallas de oro en la categoría femenina de 45 a 49 años. Competidoras mujeres informaron posteriormente a Fox News que no sabían que Caldas era un hombre hasta después del evento.

Paxton criticó a USMS por sus «prácticas pasadas falsas, engañosas y confusas al presentar sus competencias femeninas como espacios exclusivos para mujeres, para luego robar premios y reconocimientos otorgándoselos a hombres que compiten en eventos femeninos».

La demanda «busca que U.S. Masters Swimming rinda cuentas ante las mujeres que ha perjudicado y ante los consumidores que ha engañado».

El 1 de julio, USMS implementó una política interina que permite la participación de hombres que se identifican como mujeres en eventos femeninos, aunque les prohíbe recibir récords oficiales, clasificaciones en los mejores tiempos o premios en esas categorías.

Gracias a la orden ejecutiva firmada en febrero por el presidente Trump, que prohíbe que hombres, incluidos aquellos que «se identifican» como mujeres, participen en deportes femeninos, poco a poco los deportes de mujeres están volviendo a ser espacios seguros para la competencia justa entre mujeres y niñas. La orden tiene como objetivo «proteger las oportunidades para que las mujeres y las niñas compitan en deportes seguros y justos».

Esta decisión responde a diversos estudios que han demostrado lo que durante años era evidente: los varones tienen ventajas significativas en el rendimiento atlético respecto a las mujeres. Un estudio reciente publicado en Sports Medicine concluyó que un año de tratamiento hormonal en hombres que se identifican como mujeres produce «cambios muy modestos» en su ventaja física natural.

Además, se ha documentado que varios atletas masculinos que compiten en deportes femeninos han mostrado comportamientos violentos, especialmente contra mujeres que se oponen a su participación en estas disciplinas.

Por ello, diversas organizaciones deportivas han empezado a implementar normas que impidan que hombres biológicos se apropien de premios destinados a mujeres.

Este mes, la Universidad de Pensilvania anunció que ya no permitirá la participación de hombres trans en deportes femeninos, pidiendo disculpas por haberlo permitido anteriormente. Esta decisión fue celebrada como una victoria para las mujeres y para la nadadora estadounidense y defensora de los derechos de las mujeres, Riley Gaines, quien recuperará el título que le fue arrebatado por el nadador masculino «Lia» Thomas en 2022.