CORTESÍA, BUENOS MODALES Y NORMAS DE URBANIDAD

20.01.2023

¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE LA CORTESÍA, LOS BUENOS MODALES Y LAS NORMAS DE URBANIDAD?

Hoy en día, algunos opinan que la cortesía, los buenos modales, las normas de urbanidad y los protocolos sólo aplican para ciertos lugares y momentos en particular o cuando se quiere dar una buena impresión. Para otros, estas normas, que en otros tiempos eran parte del trato cotidiano entre las personas, ya no aplican, por ser anticuadas, o porque son para ciertos sectores, pero no para la mayoría de las personas.

Es cierto que pueden variar según la época y la cultura, sin embargo, hay algunos que son universales e inmutables, tales como el brindar el saludo, dar las gracias, pedir disculpas, ser puntual, etc.; éstos producen armonía entre los seres humanos, por lo tanto, una convivencia pacífica entre ellos.

Tristemente, vemos cómo poco a poco se les da menor importancia, cuando son fundamentales para mantener un buen equilibrio social y, sobre todo y lo mas importante, porque promueven el respeto, nos hacen pensar en la necesidad o el bienestar de un prójimo en particular; esto nos alienta a servir, y a vencernos a nosotros mismos, cuando se trata de ser cortés con alguien que no nos cae tan bien.

Y como dijo Nuestro Señor Jesucristo:

Más entre vosotros no será así, sino el que quiere hacerse grande entre vosotros, será vuestro servidor y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo. (Mat 20:26-28)

Así pues, "el ser buen tipo", educado y cortés, siguiendo normas establecidas, brindando conscientemente un servicio, una manifestación de respeto, nos hace poner en práctica virtudes, y dispone el alma al bien.... ¡Vence el mal con el bien! ... Recuerda que servir es dar y darse debe hacerse voluntaria y gratuitamente.

Así que nunca olvides que las normas de urbanidad y buenos modales son fundamentales y que contribuyen a hacer la vida más agradable a los demás y a tener buen comportamiento.

Considera siempre poner en práctica las siguientes:

  • Saludar al llegar a un lugar y despedirse al salir del mismo (la forma del saludo puede variar según la cultura).
  • Hacer buen uso del lenguaje, evitando las groserías.
  • Ser puntual en las citas, esto se traduce a respetar el tiempo de los demás.
  • Reconocer los errores y pedir disculpas cuando sea necesario.
  • Actuar con ética, tomando en cuenta los valores cívicos que se tienen qué ejercer.
  • Adecuar nuestra vestimenta a la ocasión que corresponda. La vestimenta debe ser modesta, que en ningún momento incomode a las personas con quién se esté conviviendo.
  • Dar las gracias y pedir por favor lo que requieras, te hace ser más humano.
  • Escuchar sin interrumpir a alguien cuando habla.

Y como dirían las abuelitas de antaño: "Sea educado y cortés con las personas, y evite hablar de lo que no sepa, ir a donde no lo inviten e involucrarse en lo que no sea de su incumbencia".