Redes sociales… ¡Atención Con Nuestros Niños Y Jóvenes!

No cabe duda de que las redes sociales tienen un lado positivo; sin embargo, su auge también ha suscitado algunas preocupaciones muy graves, en especial con los niños y adolescentes, ya que se han convertido en una parte importante. Para estos nativos digitales, el uso de diversas plataformas online constituye una segunda naturaleza, ya sea para conectarse con amigos, compartir opiniones o simplemente compartir su día a día. Entonces, ¿cuál es el lado oscuro de las redes sociales y qué podemos hacer para protegernos?

En una encuesta del Centro de Investigación healthychildren, casi 75 % de los adolescentes poseen un teléfono inteligente. Los adolescentes tienen acceso al internet, ven televisión y videos y descargan aplicaciones (apps) interactivas. Las aplicaciones para móviles permiten compartir fotos, jugar y hablar por video chats. 45 % de los adolescentes dicen estar "constantemente conectados" al internet. 76 % de los adolescentes utilizan por lo menos una red social. Más del 70 % de los adolescentes visitan varias redes sociales, tales como Facebook, Snapchat e Instagram. 4 de cada 5 hogares (familias) poseen un dispositivo para jugar videojuegos.

Esto es un tema bastante preocupante, El padre de familia ha dejado esto de lado por el simple hecho de que nuestros hijos estén "tranquilos" o la palabra correcta sería "hipnotizados", bajo un aparato que bien podrían pasar horas sin que se escuche un solo quejido de sus hijos, ¡Esto es entregar la autonomía de los niños y jóvenes a las empresas más ricas de la historia, ganan dinero modificando el comportamiento humano!

Entonces; ¿se podría decir que estás perdiendo el libre albedrío? En 2022 todo mundo conoce qué es un teléfono celular; apenas en los últimos 7 ó 12 años prácticamente todo el mundo ha empezado a llevar consigo en todo momento un pequeño dispositivo llamado «teléfono inteligente», apto para la modificación algorítmica de la conducta, siguiéndonos el rastro y midiendo absolutamente todo lo que hacemos, devolviéndonos reacciones prediseñadas todo el tiempo. Poco a poco, nos van hipnotizando con intenciones que desconocemos. No se nos haga cosa de casualidad o magia, que, si estamos hablando en una simple reunión con amigos de algún tema, al iniciar sesión en redes sociales ¡ya tenías un anuncio o algo relacionado con lo que estabas hablando! A todo esto, se le llama "Metadata".

Cada segundo, los algoritmos registran absolutamente todos nuestros datos, ¿En qué tipo de enlaces hacemos clic? ¿Qué vídeos vemos? ¿Cuánto tardamos en pasar de una cosa a la siguiente? ¿Dónde estamos? ¿Con quién tenemos contacto, en persona y a través de internet? ¿Qué expresiones faciales mostramos? A esto se le llama "espionaje masivo".

Es un tema que a todo mundo nos concierne y nos debería de preocupar por la cantidad de peligros que se pueden dar a conocer dentro de las redes sociales, simplemente basta con entender lo que dicen los creadores. Esto es lo que dice Sean Parker, el primer presidente de Facebook: "Tenemos que proporcionarle como un pequeño chute de dopamina cada cierto tiempo, porque alguien le ha dado a «me gusta» o comentó una foto, una publicación o lo que sea [...]. Es un bucle de retroalimentación de validación social [...], exactamente una de esas cosas que inventaría un hacker como yo para explotar un punto débil en la psicología humana [...]. Los inventores, los creadores -alguien como yo, Mark [Zuckerberg], Kevin Systrom de Instagram, toda esa gente-, lo entendíamos de manera consciente. Y, aun así, lo hicimos [...]. Cambia literalmente la relación de la persona con la sociedad, con los demás [...]. Probablemente interfiera en la productividad de formas inesperadas. A saber, lo que está haciendo en los cerebros de nuestros hijos".

Es por eso que tengamos muy presente esta frase "si un producto es gratis, tú eres el producto", Si el usuario no despierta y deja de subirse a la ruedita virtual sin pensar, vamos por muy mal camino, la educación es nuestra única arma, involucrar al usuario en su alfabetización, que comprenda que las redes sociales no son solo un entretenimiento, sino una poderosa arma de manipulación masiva si no se tratan con responsabilidad y actitud crítica.

Es inevitable que en esta era les prohibamos a nuestros hijos el uso y entendimiento de la cuestión digital, debemos ser parte de la solución e involucrarnos en comprender y supervisar, explicarles la importancia de actuar responsable y éticamente en todo momento.

¿Qué podemos hacer como padres?

• Asegúrate que tu hijo/a sólo use redes sociales apropiadas para su edad; la mayoría de las redes sociales tienen un requisito de edad.
• Habla con tu hijo/a sobre la privacidad: los perfiles de las redes sociales deben ser privados para controlar quién ve la información y los mensajes que publica.
• Habla con tu hijo/a sobre el tipo de contenido que puede resultar contraproducente cuando se publica en las redes sociales: por ejemplo, información o imágenes privadas y confidenciales, incluyendo fotos de documentos personales, entradas a espectáculos con información personal.
• Analiza con tu hijo/a un ejemplo de una publicación engañosa o falsa, señalando los diversos signos que la delatan como tal.

Cabe señalar que como todo; debemos tener control en cuánto tiempo pasamos conectados en el mundo digital; ¡a mayor uso de las redes se genera una adicción! Y peor aún: muchos aceptamos que las tecnologías de la información nos manipulen o espíen. Ciertamente las redes digitales también proporcionan valor posibilitándonos mejoras de eficiencia en muchos aspectos, laborales, hogar , sociedad, pero también nos brinda comodidad, es por eso que nosotros mismos les dedicamos gran parte de nuestro día y esfuerzo.

El auge de las redes sociales es fruto de una necesidad que se veía venir para la sociedad actual, Utilizamos el dispositivo electrónico para pedir un coche, encargar comida, encontrar información, conocer ubicaciones exactas, realizar compras, ocio, estar en continuo contacto con amigos y familiares, etc. etc... Como se está señalando, las redes sócales han cambiado la manera en que nos comunicamos, abriendo una brecha entre las generaciones antes y después de su llegada. Mientras más tiempo una persona pase conectada, menor tiempo se mantiene en contacto vivencial con las personas de su entorno.

Se debe tener presente que las redes sociales no podrán tener control en los niños y adolescentes, siempre que sus responsables no lo permitan, esto quiere decir, que en la vida de los estudiantes no sólo influyen sus amistades o las redes sociales, sino también la formación que reciben en casa y en el colegio. Por tal razón, los padres, más que los profesores, deben primero informarse sobre todo lo que implica este fenómeno de internet y redes sociales, para poder estar alerta y aconsejar a los niños y adolescentes para que sepan escoger bien los sitios que visitan, y enseñarles, con el ejemplo y su experiencia sobre las consecuencias que pueden traer si sus hijos concentran su vida en lo que ven en internet. Es necesario que los padres sepan quiénes son los amigos de sus hijos en redes sociales, e incluso, los que podrían hacerse amigos de sus hijos en estos sitios, para tener un mejor control.

¡Atención Con Nuestros Niños Y Jóvenes!

Juan Jauregui C.